Hace justo cinco años, con la carrera recién acabada y pensando en cómo iba a afrontar el doctorado y sobretodo cómo me iba a mantener mientras tanto, una mañana que me aburría hice este pequeño autoretrato con una ambientación decimonónica. Esto fue el germen de una idea que me llevó a realizar una exposición en la cafetería que solíamos frecuentar mis amigos y yo (una cafetería con una estética muy apropiada por cierto).
La exposición se llamó "Excelsa e Irreverente exposición Retratista y Costumbrista de Postrimerías del Siglo XIX", un título sencillo que ponía de relieve lo serio de la intervención.
Las ilustraciones que exponía eran en su mayoría retratos de mis amigos y lo hice más por pasármelo bien y hacer algo diferente en el pueblo más que para ganarme unos euros...
El caso es que lo recuerdo con cariño porque sin esperármelo, en plena exposición me convocaron y empecé a trabajar de profesor interino y las incertidumbres por cómo me iba a ganar la vida desaparecieron casi antes de presentarse.
Por cierto... a la tercera semana de exposición desaparecieron tres retratitos, el de arriba fue uno de ellos.
aiiiiii, te traes un aire a Dorian Grey en este retrato decimonónico, yo creo que se lo llevó alguna fan tuya, jeje, nos vemos el jueves, Cuatrero.
ResponderEliminarpOS ES UNA IDEA guapa
ResponderEliminarqué putada lo de "la desaparición", me lo hacen a mí y los visto de toreros...
Deberías leerte el cómic de alan moore "la liga de los hombres extraordinarios" (nada q ver con la pel, gracias a Dios), con lo decimonónico que eres te gustaría...
ta mña
jejeje... el título en España de "El Retrato de Dorian Grey" podría ser: "Señorcico que me quede como estoy"
ResponderEliminarLa verdad es que es una idea original juntar a los grandes personajes literarios de la época... un día de estos me lo pillo
ta mañana guapetones!